Mi camino inicial fue en el mundo de las finanzas, donde llegué a desempeñarme como directora financiera. Durante años lideré equipos, gestioné recursos y construí estructuras sólidas. Pero al mismo tiempo, siempre sentí un llamado profundo hacia lo humano, el ser y sus procesos de transformación.

Esa escucha interna me llevó a emprender un viaje muy profundo: una transformación personal que me abrió a aprender con grandes maestros el camino del ser, la conciencia y la sanación. Hoy, esa integración entre lo racional y lo espiritual, entre la estructura y el alma, es parte esencial de la medicina que comparto.

He caminado muchos senderos, con el alma abierta y el cuerpo como brújula. Atravesé umbrales, búsquedas, tierras, rupturas y renacimientos.

Y si algo he aprendido en todo este recorrido es que la verdadera sanación no es lineal, ni rápida, ni uniforme:

es profundamente humana, cíclica y única para cada alma.

Acompaño a las almas que están atravesando esos umbrales. Mujeres que sienten que ya no pueden sostener lo que antes las contenía, que están listas para dejar de fingir, para volver a habitarse, para abrirse a su verdad.

Mi tarea no es dirigir, sino estar presente. Sostener sin invadir. Nombrar lo invisible. Escuchar lo que se mueve adentro.

Trabajo desde un enfoque que une lo energético, emocional, mental y corporal. A través de la reconexión con el útero, la activación del chakra corazón y garganta, y la integración del poder creativo y sexual.

Acompaño procesos donde lo que estaba dormido vuelve a encenderse.

Me formé con grandes maestros y maestras alrededor del mundo, y honro cada una de esas enseñanzas.

Reiki, Meditación, Registros Akáshicos, Tarot, PNL, Coaching, Psicología, Yoga Kundalini, Sexualidad Sagrada, Neurociencia Emocional, PSYCH-K®, Biodescodificación y Conciencia Celular… son herramientas que integro, pero no me definen.

Lo que realmente me sostiene es otra cosa: son mis guías, con una sabiduría antigua que vive en mi cuerpo. Una memoria que no aprendí en libros, sino que me atraviesa el alma desde mis ancestros.

Viajar —por la tierra y hacia dentro— es parte de mi medicina, donde lo sagrado se despierta a través del movimiento, la conexión con la tierra, los rituales y la presencia compartida.

No ofrezco soluciones mágicas. Ofrezco un espacio seguro, humano, profundo. Un lugar donde cada alma pueda volver a sí misma sin tener que adaptarse ni justificarse, simplemente recuerde la propia medicina que lleva adentro.